Lo primero de todo, es que yo meses antes de empezar con él, no lo podía ni ver, me caía super mal a causa de unos problemillas que tuvimos..
Un día de verano, que nos encontramos los dos por casualidad, en un sitio donde solía parar toda la juventud, le dio por hablarme y gastarme bromas, pero sin esperarmelo. Yo le contestaba de malas formas, por que la verdad es que no me hacía ninguna gracia. Pero a partir de ese día, nos solíamos encontrar en ese lugar por casualidad, y con una tontería y con otra acabábamos hablando y ya hasta parecía que me iba cayendo mejor.
Empezó el colegio y yo estaba en su clase, hablábamos todos los días ya en el colegio, se llevaba todo el día haciéndome reír y hablando conmigo. Nos contábamos todo lo que nos pasaba, con nuestras respectivas "parejas" si se le puede llamar así.. y así un día y otro. En el colegio ya acabamos sentándonos juntos en clase, y estar todo el recreo uno al lado del otro.
Ya me parecía extraño, que cuando llegaba el fin de semana, yo en lo único que pensaba era en volver el lunes para estar con él. Pero yo en todo momento lo negaba, negaba lo que sentía y lo que me estaba pasando. Eso no me podía estar pasando a mí.
Mañana os contaré la 2ª parte de la historia..
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